Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)

En qué consiste el Trastorno obsesivo-compulsivo

Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)

El trastorno obsesivo-compulsivo se caracteriza por la presencia de pensamientos o imágenes indeseadas, repetitivas y que causan gran nivel de ansiedad de la persona que sufre el trastorno.

Las obsesiones tienen que ver con la suciedad, el orden, la religión, la violencia, o el sexo, entre otros. Para reducir el malestar que producen estas obsesiones, la personas suele realizar compulsiones (conductas compulsivas) o rituales, que son acciones motoras o mentales que se realizan siguiendo un determinado orden (por ejemplo, lavarse las manos siempre del mismo modo, rezar mentalmente una oración, comprobar repetidas veces puertas, cerraduras y butano, entre otros).

En algunas ocasiones, las obsesiones están presentes sin que la persona realice compulsiones (aunque se puede considerar que las compulsiones en estos casos no se pueden observar directamente). También, aunque con una frecuencia muy baja, pueden aparecen compulsiones sin obsesiones.

Este trastorno produce un gran malestar, afecta significativamente al funcionamiento diario de la persona, produciendo grandes limitaciones.

Para este trastorno, el psicólogo cognitivo-conductual dispone también de un tratamiento concreto, que ha demostrado científica y clínicamente su eficacia.