Encopresis

Problemas de encopresis en niños y adolescentes

Encopresis

La encopresis consiste en una evacuación repetida e involuntaria de las heces en lugares inadecuados (armarios, suelo, en la propia ropa, ….), después de los cuatro años de edad. Comprende desde el simple manchado de ropa hasta la evacuación de mayores cantidades de heces.

La encopresis puede deberse a múltiples factores, tales como, el estreñimiento crónico, un entrenamiento inapropiado (p.ej.: por ser entrenado a una edad muy temprana, por ser demasiado exigente, por utilizar procedimientos coercitivos -de presión o castigo-), las propias experiencias (de malestar, dolor y/o incomodidad) asociadas a la defecación y acontecimientos vitales estresantes en la vida cotidiana del niño o trastornos emocionales, por nombrar las más frecuentes.

Este trastorno tiene efectos muy perturbadores para el niño y su familia, se siente avergonzado e infeliz, cree que está haciendo algo malo y que es una carga para la familia, tiende a aislarse para evitar situaciones de interacción comprometidas y tiene escasa popularidad entre sus compañeros.

Por otra parte, los padres no suelen comprender la naturaleza del trastorno, ni muchos hábitos que acompañan al ensuciamiento (esconder la ropa sucia, permanecer sucios después del incidente, etc...). La mayoría piensa que sus hijos se ensucian porque son perezosos, descuidados y poco aseados. Todo esto provoca un gran deterioro en la familia. Así, es esencial trabajar estos problemas e informar a los padres sobre cómo funciona el trastorno para que puedan comprenderlo y manejarlo adecuadamente.

Tratamiento


No hay una solución única que pueda resultar adecuada para todos los niños con encopresis, debido a que se origina por múltiples factores. El tratamiento debe derivarse de los hallazgos de la evaluación. A modo de orientación, pueden citarse los procedimientos más asiduamente aplicados:

Diversas técnicas operantes (estrategias de recompensas para el éxito en el control de evacuaciones y de consecuenciasleves no humillantes para la falta de éxito).

Es importante desculpabilizar al niño y a los padres y trabajar en terapia con la familia, informando y asesorando.